La industria musical cristiana une fuerzas este abril para lanzar la primera celebración oficial del Mes de la Música Cristiana, una iniciativa de GMA (Gospel Music Association) que busca potenciar el alcance de este género durante la temporada de Pascua, cuando su consumo alcanza picos históricos a nivel global.
¿Por qué abril?
La conexión entre la Semana Santa y la música de fe no es casualidad. Según datos de la Gospel Music Association (GMA), el Domingo de Resurrección registra un aumento del 68% en streams de canciones cristianas comparado con otras fechas. Este año, la estrategia se amplía a todo el mes, permitiendo:
- Redescubrir clásicos como «Shackles (Praise You)» de Mary Mary o «You Say» de Lauren Daigle.
- Impulsar nuevos talentos como Josiah Queen y Jekalyn Carr, protagonistas de la serie «Positive Vibes Only».
- Integrar plataformas como Spotify y Amazon Music, que lanzaron listas especiales con 70+ temas, desde himnos de Hillsong UNITED hasta fusiones urbanas de Hulvey.
Cómo sumarse a la celebración
La GMA propone tres ejes de participación:
- Streaming con propósito: Las playlists oficiales incluyen joyas como «Honey In The Rock» (Brooke Ligertwood) y el éxito viral «Famous For» de Tauren Wells.
- Experiencias en vivo: Tours como el de MercyMe y Winter Jam incorporarán material visual exclusivo del Mes de la Música Cristiana.
- Compartir en redes: Usar el hashtag #ChristianMusicMonth al publicar letras que inspiren, fragmentos de conciertos o testimonios vinculados a canciones.
Cartelera destacada
Fecha | Evento |
---|---|
7 de abril | Tauren Wells (acústico) |
14 de abril | Josiah Queen (sesión en vivo) |
21 de abril | Jekalyn Carr (colaboración) |
28 de abril | Adrienne Bailon ft. New Breed |
«No se trata solo de ritmos, sino de transformar vidas mediante letras que reflejan esperanza», explica el comunicado de la GMA, que coordina esta iniciativa junto a la Recording Academy (responsable de los GRAMMY).
Abril podría marcar un punto de inflexión para este género que ya mueve US$1.300 millones anuales según Billboard. La apuesta clara: demostrar que la música cristiana tiene un espacio permanente en los grandes escenarios.